Add parallel Print Page Options

y ha entregado su vida al servicio del Señor Jesucristo. Recíbanla bien, como debe recibirse a todos los que pertenecen a la gran familia de Dios. Ayúdenla en todo lo que necesite, porque ella ha ayudado a muchos, y a mí también.

Les mando saludos a Priscila y a Áquila, que han trabajado conmigo sirviendo a Jesucristo. Por ayudarme, pusieron en peligro sus vidas, así que les estoy muy agradecido, como lo están las iglesias de los cristianos no judíos.

Read full chapter